Hace tiempo que no lloro.
Orgullosa estaba de mi
lágrima fácil,
del sollozo diario,
del lamento rutinario,
ojos hinchados de aspecto
olvidado
que ahora lucen
recuperados.
Hace tiempo que no lloro.
He inventado motivos,
infinitas razones,
trágicos momentos para
provocar la pena
y derramar el llanto.
Pero nada pasa…el pañuelo
sigue intacto.
Cansada ya de intentarlo
ahora no puedo ni
imaginarlo.
Voy a rendirme y
aceptarlo:
Hace tiempo que no lloro,
hace tiempo,
desde que te conocí,
que ya no lloro.
Karlita Stakmon